Durante los últimos años la observación de aves se ha convertido en una de las actividades alrededor del turismo de naturaleza más populares y que más adeptos ha ganado. Con mayor frecuencia vemos grupos de personas con binoculares, cámaras, guías de aves en los diferentes parajes de la geografía nacional disfrutando de la exuberancia de la biodiversidad. Colombia como el país con la mayor riqueza de especies de aves en el mundo es el destino ideal para quienes disfrutan de la observación, sin embargo, esto también plantea muchos desafíos en cuanto al manejo adecuado del recurso, su conservación y sostenibilidad.
Desde hace unos años la Asociación Calidris se ha involucrado en el desarrollo del aviturismo del país y desde 2015 junto a la Sociedad Audubon desarrollado las Rutas de Aviturismo de Colombia, contribuyendo a la generación de información consolidada de la biodiversidad y la avifauna asociada a los sitios de pajareo ya la caracterización de los servicios y los emprendimientos que hay en las comunidades locales. Otro de los componentes del desarrollo de las rutas ha sido la capacitación en identificación de aves, habilidades de guianza y promoción de los servicios, a través de estos procesos de capacitación se han formado cerca de 500 informadores de aves a lo largo de las 4 rutas de aviturismo y cerca de 300 operadores turísticos.
Las rutas de aviturismo de Colombia conectan los servicios turísticos locales con los operadores y guías especializados, al promover el uso de informadores turísticos locales, se asegura la promoción de aspectos culturales y étnicos, además de reconocer y visualizar los esfuerzos en conservación que las comunidades han llevado a cabo durante años.
En ese sentido el aviturismo desde nuestra perspectiva, se convierte en una alternativa económica que apoya e incentiva procesos de conservación en áreas y ecosistemas donde habitan las aves y que los recursos económicos generados por medio de la prestación de servicios para el aviturismo y el turismo de naturaleza, puedan mejorar las condiciones de vida de las comunidades locales.
El 2020 debido a la pandemia, presentó retos para este sector pero también nos brindó la oportunidad de aprender a maximizar las opciones de las capacitaciones virtuales, e interactuar con un mayor número de personas de las que estábamos alcanzando con el modelo tradicional y prepararnos para establecer protocolos de bioseguridad para operadores turísticos e informadores de aves que permitan vivir la experiencia de la observación de aves sin riesgo. Consolidamos el canal de Youtube Red de Informadores de Aviturismo de Colombia, en el cual los informadores de aviturismo de todas las rutas, están compartiendo los distintos sitios para hacer observación de aves, las iniciativas de conservación y las recomendaciones en la compra y manejo de equipo óptico para quienes se inician en el mundo de la observación de aves.
Los procesos que se han adelantado a lo largo del país han sido posibles de la mano de diferentes aliados como Fontur, la Gobernación del Valle del Cauca, la Universidad ICESI, Transforma, CEPF (Fondo de Alianzas para Ecosistemas Críticos) y Patrimonio Natural, quienes como nosotros apuestan al desarrollo comunitario para la sostenibilidad local, ingrediente fundamental para la conservación.
Por: Pedro A. Camargo Martínez